Evidentemente.
José Luis Bonet, presidente de Freixenet, ha repetido hoy en el Forum Europa lo que dijo hace unos días en EEUU: «Freixenet es una empresa catalana, y por tanto española (…) Muchos ciudadanos catalanes, incluido yo mismo, quieren seguir siendo españoles (…) Cataluña es una parte esencial de España y así debe seguir».
Decía Chesterton que en los cuentos infantiles los ríos bajan llenos de vino sólo para recordarnos que en realidad bajan llenos de agua. Gracias a que los nacionalistas nos emborrachan con su fantasmagórica Disneylandia independentista, el Sr. Bonet nos presta el inestimable servicio de recordar la obvia realidad: que digan lo que digan los ideólogos, Cataluña es España.
Que brindemos con de cava Freixenet por muchos años.
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