Esta gente del chiringuito separatista cambia de ideas como de calzones.
Cuenta Mitaurored como en enero de 2012, hace apenas 2 años, Joan Vintró Castells se apuntó a una conferencia para pedir al PP que acabara con la prohibición de los toros en Cataluña, impuesta a todos los catalanes por los nacionalistas por ser una fiesta «espanyola». El catedrático de la UB dijo que los artículos que vulneran la Constitución son el 20 (libertad de expresión y creación artística), 44 (acceso a manifestaciones artísticas), 46 (protección del patrimonio histórico y cultural de España), 38 (libertad de empresa), 139 (libre circulación de bienes, servicios y personas), y 93 (criterios de proporcionalidad y no arbitrariedad).
No hace mucho, Vintró se apuntó al Consell Assessor per a la Transició Nacional, el chiringuito de la Generalitat para planificar la secesión. Vintró es uno de los encargados de ver cómo puede hacerse saltándose la Constitución.
¿Coherencia? ¿Torería?. Qué bien nos arrimamos quan la bossa sona, oi señor catedrático?. ¡Olé, olé y olé!
Categories: Arte dulce, Huid del nacionalismo
Simplemente como apunte: El Sr. Juan Vintró es hermano de la comunista Eulalia Vintró, que durante muchos años fue líder de la ICV y concejal en el Ayuntamiento de Barcelona.
Se van a llevar un tortazo!!! A muchos les habrán prometido que seguirán disfrutando de unas prebendas suntuosas hasta el infinito y más allá,… Y les asesoran, les alaban, les babean,… e incluso les contradicen ¿¿¿???
Estos personajes han convertido el odio a todo lo español, en regla general de funcionamiento. Produce pena pensar que aún, en una imposible República Catalana, el odio seguiría siendo pieza angular de esta casta política para vivir como auténticos despostas.
LOS CATALANAZIS SON SIEMPRE VIVIDORES, LADRONES, SIEMPRE ESTÁN DEL LADO DE QUIÉNES LES DE DINERO
SEÑOR JOAN VINTRÓ CASTELLS,
rancio abolengo taurino
de aficionado ejemplar
era luz en su camino.
Hasta que sonó el clarín
que derivó su destino
al terreno de tahures
do medra el separatismo.
Se acabó su Fiesta Brava
y ha quedado usted mohino.
Le queda el toro embolado,
desahogo pueblerino.