Ara ja sabem que el «bilingüisme cordial» del PP consisteix en menystenir l’espanyol.

Catalunya no xuta. Ja no dirigeix l’economia espanyola, la sociedad está escindida, se apaga la creatividad y se pudre la cultura. Es la consecuencia de 45 años de Nacionalistada.

Hay 3 responsables.

Primero, el nacionalismo y sus chachas oficiales  (PSC-PSOE, Podemos, etc).

Segundo, la «sociedad civil». O sea, artistas, academia, intelectuales, obispos… y sobre todo capitalistas, que tienen un deber especial hacia la sociedad. Nos hemos fijado ya muchas veces en el hundimiento moral y profesional del Círculo de Economía durante estos 10 años de prusés. Este club de rentistas que van de cena en cena evadiendo su responsabilidad social es promotor y corresponsable de la fragmentación decadente de Cataluña. Sí, a aquellos rentistas millonarios que aplaudían a los golpistas, diseñaban la hoja de ruta económica del prusés y en muchos casos pagaban sus costes de propaganda (oi, sr. Conde de Cobró?). Els mateixos que encara no fa un mes babejaven davant Jordi Pujol, el gran corrupte i causant de la Nacionalistada que ha ensorrat Catalunya.

Pero hay un último reponsable: el PP. Un partit nacional promotor i corresponsable del nacionalisme arreu d’Espanya, de Catalunya (recorda l’assassinat polític dels lliures de nacionalisme al Majestic?) a València i Balears, passant per Galícia.

Es una historia que ya conocemos porque la hemos visto con Aznar, Rajoy y Casado:

• El «nuevo» líder del PP viene a Cataluña… perdón, a Barcelona, para hacer ver que le importamos.
• Se reúne con la resistencia popular al nacionalismo… perdón, con los burgueses nacionalistas (o com se diguin avui)-Godó-Pont Aeri.
• Les recrimina su complicidad como hizo Valls… perdón,  suelta alguna cosita en catalán, se disculpa por no haber escuchado a Cataluña, les dice que quiere ser el nuevo CiU, que Cataluña es el motor de España, que soucollonuts, que lasolimpiadas92, que casisomunanació, que tenéisqueliderarespanya. O incluso les lame que «la nacionalidad catalana debe recuperar el liderazgo».
• Luego llega al Gobierno, acuerda con el PSOE y Vox los asuntos de Estado para salvaguardarlo del nacionalismo… perdón, entrega nuevas estructuresdestat al nacionalismo y lo que le pidan los lazis a cambio de sentarse unos añitos en el váter de la Moncloa.

És la història del Sistema de la Transició. Hace 1 año Feijóo vino a mendigar al Círculo de Economía y les dijo que hay que recuperar «el espíritu olímpico», Cataluña «necesita hablar menos de política y más de economía» (ya se sabe que para el PP «la economía lo es todo» y retar al nacionalismo es un tabú), «no vengo a prejuzgar sino a aprender, estudiar, y a comportarme como un ciudadano que respeta a todo el mundo». Ah, y que «la nacionalidad catalana debe recuperar el liderazgo». La misma sumisión y el babeo de siempre al nacionalismo.

Pero lo que dijo ayer en el mismo foro es tremendo:

• Abriré una etapa en la que «Cataluña y los intereses de los catalanes sean prioritarios». ¿Prioritarios sobre los de resto de españoles?
• «Los catalanes son los que más impuestos pagan de España». Porque la Gene quiere, claro.
• «El PP ha cometido errores en Cataluña». Seguro que se refiere a su pésima gestión del golpe de Estado, oi?
• Y lo más grave: «En Galicia, en público, nunca me he expresado en castellano». ¿Te da asco la lengua mayoritaria de tus gobernados? Et fa fàstic la llengua comuna dels espanyols, Feijóo? ¿Esto es tu «bilingüismo cordial»?

Como dice Arcadi Espada hoy en El Mundo, «el PP cree que una Barcelona independentista es lo normal». Però n’Arcadi, l’Ivan Karamázov català, es queda curt: el PP cree que el nacionalismo es lo normal en Cataluña, Galicia, Valencia, Baleares, Navarra, Vascongadas, Andalucía… y si es posible, en cada autonomía.

Feijóo ha construido la España plurinacional durante su década de gobiernito en Galicia, donde ha replicado el nacionalismo de CiU en todos los ámbitos. Oiga y vea aquí a Feijóo asegurar que «Galicia es una nación sin estado», igualito que el Motxo.

Elías Bendodo, nº3 del salvífico PP, sostiene que «Yo creo que, efectivamente, España es un Estado plurinacional (…) Cataluña es una nacionalidad del Estado, como cualquier otra Comunidad Autónoma». El concejal del PP en Barcelona, Daniel Sirera, acaba de decir que«suma la visión de Feijóo de estado plurinacional».

No hi ha dubte possible: el PP ha acceptat la visió nacionalista d’Espanya com un puzzle, una especie de imperio austrohúngaro que ya sabemos cómo acabó. Y lo hace con una hipocresía tremenda: mientras el PP promueve su «España plurinacional», Ayuso calladita. Algú ho entén?

A qui voleu enganyar, PPP (Partit Popular Plurinacionalista)? Que os vote Txapote, que a los dolços ya no nos timáis. Y tenemos una alternativa joven, alegre, legal, tranquila y fiable.

Dolça i timada Espanya…

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